Frédéric Chopin
Fryderyk Franciszek Chopin (Szopen) (en francés, Frédéric François Chopin, Żelazowa Wola, Polonia, 22 de febreronota 3 o 1 de marzo1 2 de 1810 — París, 17 de octubre de 1849) fue un compositor y virtuoso pianista polaco. Es considerado como uno de los más importantes de la historia. Su perfecta técnica, su refinamiento estilístico y su elaboración armónica han sido comparadas históricamente con las de Johann Sebastian Bach, Franz Liszt y Ludwig van Beethoven por su perdurable influencia en la música de tiempos posteriores. La obra de Chopin representa el Romanticismo musical en su estado más puro.
Frédéric Chopin nació en la aldea de Żelazowa Wola, en el voivodato de Mazovia, a 60 kilómetros de Varsovia en el centro de Polonia, en una pequeña finca propiedad del conde Skarbek, que formaba parte del Gran Ducado de Varsovia. Recibió el nombre de Fryderyk Franciszek Chopin. La fecha de su nacimiento es incierta: el propio compositor (y su familia) declaraba haber venido al mundo en 1810, el 1 de marzo y siempre celebró su cumpleaños en aquella fecha, pero en su partida bautismal figura como nacido el 22 de febrero. Si bien lo más probable es que esto último fuese un error por parte del sacerdote (fue bautizado el 23 de abril en la iglesia parroquial de Brochow, cerca a Sochaczew, casi ocho semanas después del nacimiento), esta discordancia se discute hasta el día de hoy
El comienzo del año 1849 encontró a Chopin demasiado débil como para enseñar. Sólo fue capaz de visitar a su amigo Mickiewicz —tan enfermo como él—, tocar un poco el piano e improvisar algunos acordes. Al difundirse la noticia de que su estado empeoraba, gran parte de la sociedad parisina (incluyendo sus coterráneos residentes allí) quiso ir a visitarlo: alumnos, amigos, damas, todos aquellos que lo habían aplaudido cuando estaba frente al teclado quisieron verlo para decirle adiós. Uno de los más asiduos era el pintor Delacroix, que lo visitaba casi cada día para confortarlo y darle su aliento.
En ese lóbrego verano, trabajó en los borradores de su última pieza, la Mazurca en fa menor (publicada tras su muerte como Op. 68 n.º 4). Avisada del próximo final del genial compositor, su hermana Ludowika viajó desde Varsovia con su esposo e hija para verlo y atenderlo en su casa de la Place Vendôme 12. A pesar de que George Sand insistió en verlo, Ludowika le negó la entrada, aunque permitió que la hija de ella, Solange, pasara a visitarlo.
Chopin sabía que se moría, pero, sorprendentemente, dijo a los circunstantes:
Encontraréis muchas partituras, más o menos dignas de mí. En nombre del amor que me tenéis, por favor, quemadlas todas excepto la primera parte de mi método para piano. El resto debe ser consumido por el fuego sin excepción, porque tengo demasiado respeto por mi público y no quiero que todas las piezas que no sean dignas de él, anden circulando por mi culpa y bajo mi nombre.
lunes, 6 de julio de 2015
PIANISTAS CLÁSICOS
Beethoven
Ludwig van Beethoven (Bonn, Sacro Imperio Romano Germánico, 16 de diciembre de 17701 – Viena, Imperio austríaco, 26 de marzo de 1827) fue un compositor, director de orquesta y pianista alemán. Su legado musical abarca, cronológicamente, desde el período clásico hasta inicios del romanticismo musical.
Considerado el último gran representante del clasicismo vienés (después de Christoph Willibald Gluck, Joseph Haydn y Wolfgang Amadeus Mozart), Beethoven consiguió hacer trascender a la música del Romanticismo, motivando a la influencia de la misma en una diversidad de obras musicales a lo largo del siglo XIX. Su arte se expresó en numerosos géneros y aunque las sinfonías fueron la fuente principal de su popularidad internacional, su impacto resultó ser principalmente significativo en sus obras para piano y música de cámara.
Su producción incluye los géneros pianísticos (32 sonatas para piano), de cámara (16 cuartetos de cuerda, 7 tríos, 10 sonatas para violín y piano), vocal (lieder y una ópera: Fidelio), concertante (5 conciertos para piano y orquesta, uno para violín y orquesta) y orquestal (9 sinfonías, oberturas, etc.), así como el ciclo de las Nueve Sinfonías, entre ellas la Tercera Sinfonía, también llamada Eroica,2 en mi♭ mayor, la Quinta Sinfonía, en do menor y la Novena Sinfonía, en re menor (cuyo cuarto movimiento está basado en la Oda a la Alegría, escrita por Friedrich von Schiller en 1785.
Muy pronto Beethoven dejó de necesitar los conciertos y recitales en los salones de la corte para sobrevivir. Los editores se disputaban sus obras; además, la aristocracia austriaca, quizás avergonzada por la muerte de Wolfgang Amadeus Mozart en la pobreza, le asignó una pensión anual. Debido a la pérdida de sus capacidades auditivas, se entregó a una febril actividad creadora, y, a la par, sufrió penalidades personales producidas por dos desengaños amorosos. No llegó a casarse nunca pero se le atribuyen varios romances, sobre todo entre damas de la nobleza. Quizá el gran amor de su vida fue Antonie von Birkenstock, casada con el banquero alemán Franz Brentano. Luego todo terminaría mal y rompería con Antonie.
Entre 1804 y 1807 estuvo enamorado de la joven y bella condesa Josephine Brunswick, viuda del conde Joseph Graf Deym. Su amor era correspondido por parte de la condesa pero éste no pudo concretarse debido a las rígidas restricciones sociales de la época y la estricta separación entre la nobleza y el vulgo, por lo que la relación cesó. Durante este período, Beethoven había terminado Leonore, su única ópera. Compuso hasta cuatro oberturas diferentes y finalmente cambió el nombre de dicha ópera a Fidelio, en contra de sus deseos. El 20 de noviembre de 1805 fue la fecha de la primera representación, que tuvo poca afluencia de público ya que esa misma semana las tropas de Napoleón habían entrado por primera vez en Viena. En los años siguientes, Beethoven incrementó su actividad creadora y compuso muchas obras, entre ellas la Quinta Sinfonía, la Sinfonía Pastoral, la Obertura Coriolano y la bagatela para piano Para Elisa.
El 24 de marzo de 1827, Beethoven recibe la extremaunción y la comunión según el rito católico. Cabe señalar que las creencias personales de Beethoven fueron muy poco ortodoxas. Esa misma tarde entra en coma para no volver a despertar hasta dos días más tarde. Su hermano Nikolaus Johann, su cuñada y su admirador incondicional Anselm Hüttenbrenner le acompañaron al final ya que sus pocos amigos habían salido a buscar una tumba. Sus últimas palabras fueron dirigidas al vino del Rin que llegó después de mucho esperar el encargo, que se esperaba surtiera buenos efectos sobre la salud del músico: Demasiado tarde, demasiado tarde. Hüttenbrenner relató los últimos momentos del compositor el 27 de marzo de 1827 de la siguiente forma:
Ludwig van Beethoven (Bonn, Sacro Imperio Romano Germánico, 16 de diciembre de 17701 – Viena, Imperio austríaco, 26 de marzo de 1827) fue un compositor, director de orquesta y pianista alemán. Su legado musical abarca, cronológicamente, desde el período clásico hasta inicios del romanticismo musical.
Considerado el último gran representante del clasicismo vienés (después de Christoph Willibald Gluck, Joseph Haydn y Wolfgang Amadeus Mozart), Beethoven consiguió hacer trascender a la música del Romanticismo, motivando a la influencia de la misma en una diversidad de obras musicales a lo largo del siglo XIX. Su arte se expresó en numerosos géneros y aunque las sinfonías fueron la fuente principal de su popularidad internacional, su impacto resultó ser principalmente significativo en sus obras para piano y música de cámara.
Su producción incluye los géneros pianísticos (32 sonatas para piano), de cámara (16 cuartetos de cuerda, 7 tríos, 10 sonatas para violín y piano), vocal (lieder y una ópera: Fidelio), concertante (5 conciertos para piano y orquesta, uno para violín y orquesta) y orquestal (9 sinfonías, oberturas, etc.), así como el ciclo de las Nueve Sinfonías, entre ellas la Tercera Sinfonía, también llamada Eroica,2 en mi♭ mayor, la Quinta Sinfonía, en do menor y la Novena Sinfonía, en re menor (cuyo cuarto movimiento está basado en la Oda a la Alegría, escrita por Friedrich von Schiller en 1785.
Muy pronto Beethoven dejó de necesitar los conciertos y recitales en los salones de la corte para sobrevivir. Los editores se disputaban sus obras; además, la aristocracia austriaca, quizás avergonzada por la muerte de Wolfgang Amadeus Mozart en la pobreza, le asignó una pensión anual. Debido a la pérdida de sus capacidades auditivas, se entregó a una febril actividad creadora, y, a la par, sufrió penalidades personales producidas por dos desengaños amorosos. No llegó a casarse nunca pero se le atribuyen varios romances, sobre todo entre damas de la nobleza. Quizá el gran amor de su vida fue Antonie von Birkenstock, casada con el banquero alemán Franz Brentano. Luego todo terminaría mal y rompería con Antonie.
Entre 1804 y 1807 estuvo enamorado de la joven y bella condesa Josephine Brunswick, viuda del conde Joseph Graf Deym. Su amor era correspondido por parte de la condesa pero éste no pudo concretarse debido a las rígidas restricciones sociales de la época y la estricta separación entre la nobleza y el vulgo, por lo que la relación cesó. Durante este período, Beethoven había terminado Leonore, su única ópera. Compuso hasta cuatro oberturas diferentes y finalmente cambió el nombre de dicha ópera a Fidelio, en contra de sus deseos. El 20 de noviembre de 1805 fue la fecha de la primera representación, que tuvo poca afluencia de público ya que esa misma semana las tropas de Napoleón habían entrado por primera vez en Viena. En los años siguientes, Beethoven incrementó su actividad creadora y compuso muchas obras, entre ellas la Quinta Sinfonía, la Sinfonía Pastoral, la Obertura Coriolano y la bagatela para piano Para Elisa.
El 24 de marzo de 1827, Beethoven recibe la extremaunción y la comunión según el rito católico. Cabe señalar que las creencias personales de Beethoven fueron muy poco ortodoxas. Esa misma tarde entra en coma para no volver a despertar hasta dos días más tarde. Su hermano Nikolaus Johann, su cuñada y su admirador incondicional Anselm Hüttenbrenner le acompañaron al final ya que sus pocos amigos habían salido a buscar una tumba. Sus últimas palabras fueron dirigidas al vino del Rin que llegó después de mucho esperar el encargo, que se esperaba surtiera buenos efectos sobre la salud del músico: Demasiado tarde, demasiado tarde. Hüttenbrenner relató los últimos momentos del compositor el 27 de marzo de 1827 de la siguiente forma:
PELICULAS FAVORITAS
“La Vida Es Sueño”
“Corazón Valiente”
“El Secreto De La Rosa” “Titanic”
“La Vida Es Bella” "El Pianista"y otras.
MUSICA FAVORITA
El Adaggio de Albinoni
Tell Him
El Sueño De Un Hombre
Anastasia
Once Upon A December Igor Stravinski
El Pájaro De Fuego Johan Strauss
Danubio Azul Piotr Ilich Tchaikovski
El Cascanueces
Vals De Las Flores Maurice Ravel
Bolero De Ravel Ludwig Van Beethoven
Sonata º14
"Claro De Luna" Ludwig Van Beethoven
Sonata Nº8 "Patética" Frederic Chopin
Nocturno Opus 9 Nº2
bueno muchísimas otras la música alimenta el alma.
“La Vida Es Sueño”
“Corazón Valiente”
“El Secreto De La Rosa” “Titanic”
“La Vida Es Bella” "El Pianista"y otras.
MUSICA FAVORITA
El Adaggio de Albinoni
Tell Him
El Sueño De Un Hombre
Anastasia
Once Upon A December Igor Stravinski
El Pájaro De Fuego Johan Strauss
Danubio Azul Piotr Ilich Tchaikovski
El Cascanueces
Vals De Las Flores Maurice Ravel
Bolero De Ravel Ludwig Van Beethoven
Sonata º14
"Claro De Luna" Ludwig Van Beethoven
Sonata Nº8 "Patética" Frederic Chopin
Nocturno Opus 9 Nº2
bueno muchísimas otras la música alimenta el alma.
LOS 100 MEJORES LIBROS DE TODOS LOS TIEMPOS
- Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez. 469 puntos
- El señor de los anillos (Trilogía), de J. R. R. Tolkien. 389 puntos
- 1984, de George Orwell. 382 puntos
- Un mundo feliz, de Aldous Huxley. 374 puntos
- Orgullo y prejuicio, de Jane Austen. 341 puntos
- Crimen y castigo, de Fiódor Dostoyevski. 324 puntos
- Lolita, de Vladimir Nabokov. 318 puntos
- Ulises, de James Joyce. 311 puntos
- Madame Bovary, de Gustave Flaubert. 310 puntos
- En busca del tiempo perdido, de Marcel Proust. 304 puntos
- Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes. 279 puntos
- El retrato de Dorian Gray, de Oscar Wilde. 277 puntos
- Ana Karenina, de León Tolstói. 261 puntos
- El Principito, de Antoine de Saint-Exupéry. 253 puntos
- El proceso, de Franz Kafka. 247 puntos
- El ruido y la furia, de William Faulkner. 246 puntos
- Hamlet, de William Shakespeare. 246 puntos
- Lo que el viento se llevó, de Margaret Mitchell. 238 puntos
- La Odisea, de Homero. 232 puntos
- Las uvas de la ira, de John Steinbeck. 232 puntos
- El guardián entre el centeno, de J. D. Salinger. 228 puntos
- Cumbres borrascosas, de Emily Brontë. 219 puntos
- El gran Gatsby, de F. Scott Fitzgerald. 213 puntos
- Mil soles espléndidos, de Khaled Hosseini. 211 puntos
- Alicia en el país de las maravillas, de Lewis Carroll. 211 puntos
- Rebelión en la granja, de George Orwell. 209 puntos
- Los pilares de la tierra, de Ken Follett. 206 puntos
- Guerra y paz, de León Tolstói. 197 puntos
- Memorias de una geisha, de Arthur Golden. 195 puntos
- Frankenstein, de Mary W. Shelley. 191 puntos
- Los viajes de Gulliver, de Jonathan Swift. 186 puntos
- La ladrona de libros, de Markus Zusak. 183 puntos
- Matar a un ruiseñor, de Harper Lee. 183 puntos
- El conde de Montecristo, de Alejandro Dumas. 183 puntos
- Los juegos del hambre, de Suzanne Collins. 181 puntos
- Harry Potter y la piedra filosofal (Harry Potter 1 ) de J. K. Rowling. 179 puntos
- El señor de las moscas, de William Golding. 177 puntos
- Moby Dick, de Herman Melville. 174 puntos
- Los miserables, de Victor Hugo. 172 puntos
- Las aventuras de Huckleberry Finn, de Mark Twain. 170 puntos
- Tristam Shandy, de Laurence Sterne. 168 puntos
- Drácula, de Bram Stoker. 166 puntos
- El nombre de la rosa, de Umberto Eco. 166 puntos
- El extranjero, de Albert Camus. 165 puntos
- Los hermanos Karamázov, de Fiódor Dostoyevski. 164 puntos
- El amor en los tiempos del cólera, de Gabriel García Márquez. 163 puntos
- Harry Potter y las reliquias de la muerte (Harry Potter 7 ) de J. K. Rowling. 163 puntos
- El código Da Vinci, de Dan Brown. 162 puntos
- Harry Potter y el prisionero de Azkaban (Harry Potter 3 ) de J. K. Rowling. 162 puntos
- Cometas en el cielo, de Khaled Hosseini. 161 puntos
- Ensayo sobre la ceguera, de José Saramago. 159 puntos
- Las crónicas de Narnia, de C. S. Lewis. 152 puntos
- Los renglones torcidos de Dios, de Torcuato Luca de Tena. 152 puntos
- En llamas, de Suzanne Collins. 151 puntos
- Harry Potter y el cáliz de fuego (Harry Potter 4 ) de J. K. Rowling. 151 puntos
- La sombra del viento, de Carlos Ruiz Zafón. 151 puntos
- Viaje al fin de la noche, de Louis Ferdinand Céline. 151 puntos
- Harry Potter y el misterio del príncipe ( Harry Potter 6 ) de J. K. Rowling. 150 puntos
- El juego de Ender, de Orson Scott Card. 149 puntos
- La Biblia. 147 puntos
- La montaña mágica, de Thomas Mann. 147 puntos
- Harry Potter y la Orden del Fénix ( Harry Potter 5 ) de J. K. Rowling. 144 puntos
- El psicoanalista, de John Katzenbach. 141 puntos
- Trampa 22, de Joseph Heller. 141 puntos
- Por quién doblan las campanas, de Hernest Hemingway. 135 puntos
- Dr. Jekyll y Mr. Hyde, de Robert Louis Stevenson. 135 puntos
- El médico, de Noah Gordon. 134 puntos
- La metamorfosis, de Franz Kafka. 134 puntos
- La telaraña de Carlota, de E.B. White. 134 puntos
- La divina comedia, de Dante Alighieri. 132 puntos
- La señora Dalloway, de Virginia Woolf. 132 puntos
- Crepúsculo, de Stephenie Meyer. 129 puntos
- En el camino, de Jack Kerouac. 129 puntos
- La Iliada, de Homero. 127 puntos
- Jane Eyre, de Charlotte Brontë. 126 puntos
- Diario, de Ana Frank. 125 puntos
- El retorno del Rey, de J.R.R. Tolkien. 125 puntos
- El perfume, de Patrick Süskind. 124 puntos
- Fahrenheit 451, de Ray Bradbury. 124 puntos
- Crónica de una muerte anunciada, de Gabriel García Márquez. 122 puntos
- La casa de los espíritus, de Isabel Allende. 121 puntos
- Mientras agonizo, de William Faulkner. 121 puntos
- La isla del tesoro, de Robert Louis Stevenson. 119 puntos
- Todo se desmorona, de Chinua Achebe. 117 puntos
- Emma, de Jane Austen. 117 puntos
- Pasaje a la India, de E. M. Forster. 117 puntos
- Ficciones, de Jorge Luis Borges. 113 puntos
- Harry Potter y la cámara secreta (Harry Potter 2 ) de J. K. Rowling. 113 puntos
- A sangre fría, de Truman Capote. 111 puntos
- Rimas y leyendas, de Gustavo Adolfo Bécquer. 109 puntos
- El corazón es un cazador solitario, de Carson Mccullers. 104 puntos
- El Rey Lear, de William Shakespeare. 104 puntos
- Tormenta de espadas, de George R.R. Martin. 100 puntos
- Juego de tronos, de George R.R.Martin. 99 puntos
- La catedral del mar, de Ildefonso Falcones. 99 puntos
- Progreso del peregrino, de John Bunyan. 99 puntos
- El corazón de las tinieblas, de Joseph Conrad. 98 puntos
- Robinson Crusoe, de Daniel Defoe. 98 puntos
- La isla de los amores infinitos, de Daína Chaviano. 97 puntos
- David Copperfield, de Charles Dickens. 97 puntos
TENGO MIEDO
Tengo miedo. La tarde es gris y la tristeza
del cielo se abre como una boca de muerto.
Tiene mi corazón un llanto de princesa
olvidada en el fondo de un palacio desierto.
Tengo miedo. Y me siento tan cansado y pequeño
que reflejo la tarde sin meditar en ella.
(En mi cabeza enferma no ha de caber un sueño
así como en el cielo no ha cabido una estrella.)
Sin embargo en mis ojos una pregunta existe
y hay un grito en mi boca que mi boca no grita.
No hay oído en la tierra que oiga mi queja triste
abandonada en medio de la tierra infinita!
Se muere el universo, de una calma agonía
sin la fiesta del sol o el crepúsculo verde.
Agoniza Saturno como una pena mía,
la tierra es una fruta negra que el cielo muerde.
Y por la vastedad del vacío van ciegas
las nubes de la tarde, como barcas perdidas
que escondieran estrellas rotas en sus bodegas.
Y la muerte del mundo cae sobre mi vida.
Tengo miedo. La tarde es gris y la tristeza
del cielo se abre como una boca de muerto.
Tiene mi corazón un llanto de princesa
olvidada en el fondo de un palacio desierto.
Tengo miedo. Y me siento tan cansado y pequeño
que reflejo la tarde sin meditar en ella.
(En mi cabeza enferma no ha de caber un sueño
así como en el cielo no ha cabido una estrella.)
Sin embargo en mis ojos una pregunta existe
y hay un grito en mi boca que mi boca no grita.
No hay oído en la tierra que oiga mi queja triste
abandonada en medio de la tierra infinita!
Se muere el universo, de una calma agonía
sin la fiesta del sol o el crepúsculo verde.
Agoniza Saturno como una pena mía,
la tierra es una fruta negra que el cielo muerde.
Y por la vastedad del vacío van ciegas
las nubes de la tarde, como barcas perdidas
que escondieran estrellas rotas en sus bodegas.
Y la muerte del mundo cae sobre mi vida.
VÍRESE
Hoy que danza en mi cuerpo la pasiòn de Paolo
y ebrio de un sueño alegre mi corazòn se agita:
hoy que sé la alegría de ser libre y ser solo
como el pistilo de una margarita infinita:
oh mujer -carne y sueño-, ven a encantarme un poco,
ven a vaciar tus copas de sol en mi camino:
que en mi barco amarillo tiemblen tus senos locos
y ebrios de juventud, que es el más bello vino.
Es bello porque nosotros lo bebemos
en estos temblorosos vasos de nuestro ser
que nos niegan el goce para que lo gocemos.
Bebamos. Nunca dejemos de beber.
Nunca, mujer, rayo de luz, pulpa blanca de poma,
suavices la pisada que no te hará sufrir.
Sembremos la llanura antes de arar la loma.
Vivir será primero, después será morir.
Y después que en la ruta se apaguen nuestras huellas
y en el azul paremos nuestras blancas escalas
-flechas de oro que atajan en vano las estrellas-,
oh Francesca, hacia dònde te llevarán mis alas!
Hoy que danza en mi cuerpo la pasiòn de Paolo
y ebrio de un sueño alegre mi corazòn se agita:
hoy que sé la alegría de ser libre y ser solo
como el pistilo de una margarita infinita:
oh mujer -carne y sueño-, ven a encantarme un poco,
ven a vaciar tus copas de sol en mi camino:
que en mi barco amarillo tiemblen tus senos locos
y ebrios de juventud, que es el más bello vino.
Es bello porque nosotros lo bebemos
en estos temblorosos vasos de nuestro ser
que nos niegan el goce para que lo gocemos.
Bebamos. Nunca dejemos de beber.
Nunca, mujer, rayo de luz, pulpa blanca de poma,
suavices la pisada que no te hará sufrir.
Sembremos la llanura antes de arar la loma.
Vivir será primero, después será morir.
Y después que en la ruta se apaguen nuestras huellas
y en el azul paremos nuestras blancas escalas
-flechas de oro que atajan en vano las estrellas-,
oh Francesca, hacia dònde te llevarán mis alas!
LA CANCIÓN DESESPERADA
Emerge tu recuerdo de la noche en que estoy.
El río anuda al mar su lamento obstinado.
Abandonado como los muelles en el alba.
Es la hora de partir, oh abandonado!
Sobre mi corazón llueven frías corolas.
Oh sentina de escombros, feroz cueva de náufragos!
En ti se acumularon las guerras y los vuelos.
De ti alzaron las alas los pájaros del canto.
Todo te lo tragaste, como la lejanía.
Como el mar, como el tiempo. Todo en ti fue naufragio!
Era la alegre hora del asalto y el beso.
La hora del estupor que ardía como un faro.
Ansiedad de piloto, furia de buzo ciego,
turbia embriaguez de amor, todo en ti fue naufragio!
En la infancia de niebla mi alma alada y herida.
Descubridor perdido, todo en ti fue naufragio!
Te ceñiste al dolor, te agarraste al deseo.
Te tumbó la tristeza, todo en ti fue naufragio!
Hice retroceder la muralla de sombra,
anduve más allá del deseo y del acto.
Oh carne, carne mía, mujer que amé y perdí,
a ti en esta hora húmeda, evoco y hago canto.
Como un vaso albergaste la infinita ternura,
y el infinito olvido te trizó como a un vaso.
Era la negra, negra soledad de las islas,
y allí, mujer de amor, me acogieron tus brazos.
Era la sed y el hambre, y tú fuiste la fruta.
Era el duelo y las ruinas, y tú fuiste el milagro.
Ah mujer, no sé cómo pudiste contenerme
en la tierra de tu alma, y en la cruz de tus brazos!
Mi deseo de ti fue el más terrible y corto,
el más revuelto y ebrio, el más tirante y ávido.
Cementerio de besos, aún hay fuego en tus tumbas,
aún los racimos arden picoteados de pájaros.
Oh la boca mordida, oh los besados miembros,
oh los hambrientos dientes, oh los cuerpos trenzados.
Oh la cópula loca de esperanza y esfuerzo
en que nos anudamos y nos desesperamos.
Y la ternura, leve como el agua y la harina.
Y la palabra apenas comenzada en los labios.
Ese fue mi destino y en él viajó mi anhelo,
y en él cayó mi anhelo, todo en ti fue naufragio!
Oh, sentina de escombros, en ti todo caía,
qué dolor no exprimiste, qué olas no te ahogaron!
De tumbo en tumbo aún llameaste y cantaste.
De pie como un marino en la proa de un barco.
Aún floreciste en cantos, aún rompiste en corrientes.
Oh sentina de escombros, pozo abierto y amargo.
Pálido buzo ciego, desventurado hondero,
descubridor perdido, todo en ti fue naufragio!
Es la hora de partir, la dura y fría hora
que la noche sujeta a todo horario.
El cinturón ruidoso del mar ciñe la costa.
Surgen frías estrellas, emigran negros pájaros.
Abandonado como los muelles en el alba.
Sólo la sombra trémula se retuerce en mis manos.
Ah más allá de todo. Ah más allá de todo.
Es la hora de partir. Oh abandonado!
Emerge tu recuerdo de la noche en que estoy.
El río anuda al mar su lamento obstinado.
Abandonado como los muelles en el alba.
Es la hora de partir, oh abandonado!
Sobre mi corazón llueven frías corolas.
Oh sentina de escombros, feroz cueva de náufragos!
En ti se acumularon las guerras y los vuelos.
De ti alzaron las alas los pájaros del canto.
Todo te lo tragaste, como la lejanía.
Como el mar, como el tiempo. Todo en ti fue naufragio!
Era la alegre hora del asalto y el beso.
La hora del estupor que ardía como un faro.
Ansiedad de piloto, furia de buzo ciego,
turbia embriaguez de amor, todo en ti fue naufragio!
En la infancia de niebla mi alma alada y herida.
Descubridor perdido, todo en ti fue naufragio!
Te ceñiste al dolor, te agarraste al deseo.
Te tumbó la tristeza, todo en ti fue naufragio!
Hice retroceder la muralla de sombra,
anduve más allá del deseo y del acto.
Oh carne, carne mía, mujer que amé y perdí,
a ti en esta hora húmeda, evoco y hago canto.
Como un vaso albergaste la infinita ternura,
y el infinito olvido te trizó como a un vaso.
Era la negra, negra soledad de las islas,
y allí, mujer de amor, me acogieron tus brazos.
Era la sed y el hambre, y tú fuiste la fruta.
Era el duelo y las ruinas, y tú fuiste el milagro.
Ah mujer, no sé cómo pudiste contenerme
en la tierra de tu alma, y en la cruz de tus brazos!
Mi deseo de ti fue el más terrible y corto,
el más revuelto y ebrio, el más tirante y ávido.
Cementerio de besos, aún hay fuego en tus tumbas,
aún los racimos arden picoteados de pájaros.
Oh la boca mordida, oh los besados miembros,
oh los hambrientos dientes, oh los cuerpos trenzados.
Oh la cópula loca de esperanza y esfuerzo
en que nos anudamos y nos desesperamos.
Y la ternura, leve como el agua y la harina.
Y la palabra apenas comenzada en los labios.
Ese fue mi destino y en él viajó mi anhelo,
y en él cayó mi anhelo, todo en ti fue naufragio!
Oh, sentina de escombros, en ti todo caía,
qué dolor no exprimiste, qué olas no te ahogaron!
De tumbo en tumbo aún llameaste y cantaste.
De pie como un marino en la proa de un barco.
Aún floreciste en cantos, aún rompiste en corrientes.
Oh sentina de escombros, pozo abierto y amargo.
Pálido buzo ciego, desventurado hondero,
descubridor perdido, todo en ti fue naufragio!
Es la hora de partir, la dura y fría hora
que la noche sujeta a todo horario.
El cinturón ruidoso del mar ciñe la costa.
Surgen frías estrellas, emigran negros pájaros.
Abandonado como los muelles en el alba.
Sólo la sombra trémula se retuerce en mis manos.
Ah más allá de todo. Ah más allá de todo.
Es la hora de partir. Oh abandonado!
INGENIERÍA INDUSTRIAL
La ingeniería industrial es la rama de la ingeniería que se ocupa de la optimizan de uso de recursos humanos, técnicos, informativos así como el manejo y gestión óptimos de los sistemas de transformación de bienes y servicios, evaluación de sistemas integrados aplicados en campos de personal, riqueza, conocimientos, información, equipamiento, energía, materiales y procesos, con la finalidad de obtener productos o servicios útiles a la sociedad y con alta consideración al medio ambiente. La ingeniería industrial utiliza los principios, métodos del análisis, síntesis de la ingeniería y el diseño para especificar, evaluar, predecir y mejorar los resultados obtenidos de tales sistemas. La ingeniería industrial emplea conocimientos y métodos de las ciencias matemáticas, físicas, sociales, políticas públicas, técnicas de gerencia etc. de una forma amplia y genérica, para determinar, diseñar, especificar, analizar, implementar y mejorar continuamente los sistemas (en sentido amplio del término).
La ingeniería industrial es la rama de la ingeniería que se ocupa de la optimizan de uso de recursos humanos, técnicos, informativos así como el manejo y gestión óptimos de los sistemas de transformación de bienes y servicios, evaluación de sistemas integrados aplicados en campos de personal, riqueza, conocimientos, información, equipamiento, energía, materiales y procesos, con la finalidad de obtener productos o servicios útiles a la sociedad y con alta consideración al medio ambiente. La ingeniería industrial utiliza los principios, métodos del análisis, síntesis de la ingeniería y el diseño para especificar, evaluar, predecir y mejorar los resultados obtenidos de tales sistemas. La ingeniería industrial emplea conocimientos y métodos de las ciencias matemáticas, físicas, sociales, políticas públicas, técnicas de gerencia etc. de una forma amplia y genérica, para determinar, diseñar, especificar, analizar, implementar y mejorar continuamente los sistemas (en sentido amplio del término).
Biografía
Zipaquira 10-marzo-1999
Nací en Zipáquira vivo en la concepción
Karen Adriana Galeano Pardo tengo 16 años vivo con mi madre y mis hermanos a los 5 años comencé mis estudios en el liceo integrado de zipaquira .
El propósito de mi vida es terminar con honores mis estudios y poder ingresar a una universidad buena y estudiar ingeniería industrial .Tengo muchas ambiciones y metas que espero cumplir , algunos de mis gusto y pasatiempos es leer ( el leído mas de 40 libros ) me gusta mucho el deporte practico fútbol y tenis , me encanta el ámbito artístico .
Zipaquira 10-marzo-1999
Nací en Zipáquira vivo en la concepción
Karen Adriana Galeano Pardo tengo 16 años vivo con mi madre y mis hermanos a los 5 años comencé mis estudios en el liceo integrado de zipaquira .
El propósito de mi vida es terminar con honores mis estudios y poder ingresar a una universidad buena y estudiar ingeniería industrial .Tengo muchas ambiciones y metas que espero cumplir , algunos de mis gusto y pasatiempos es leer ( el leído mas de 40 libros ) me gusta mucho el deporte practico fútbol y tenis , me encanta el ámbito artístico .
lunes, 1 de junio de 2015
QUIEN SOY
Bueno para empezar les voy decir mi nombre el cual es Karen Adriana Galeano Pardo.
Soy una persona única e irrepetible, una persona que confía en si misma y se quiere a si misma, puedo basarme en mi auto confianza para realizar todo lo que me propongo y tengo la seguridad de que por mi forma de ser lo puedo conseguir, pensando siempre en positivo, superando todas las barreras, y no dejarme vencer por alguna adversidad que se presente en el camino.
Me encanta ser como soy, ya que así, puedo tener mucha mas seguridad en lo que decida, eso si, también reconozco que debo cambiar algunas cosas de mi, para ser mejor ser humano cada día.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)